Chacarita - Buenos Aires - Argentina
Hoy me he acercado a Chacarita ... en "Baires", con Maia a la espalda, en la mochila que nos regaló Andreu (una abraçada des d’aquí !). Ella duerme plácidamente mecida por el vaivén que transmiten mis pasos al armazón de aleación que la sustenta sobre mis hombros. Estamos buscando un departamento para poder instalarno mejor en esta megalopolis de 10 millones de almas. Noelia trabaja más allá, a unas cuadras... en Greenpeace Argentina.
Las informaciones que nos llegaron sobre este barrio son un tanto desalentadoras :
- Mmhh... , nadie dice que es de Chacarita, está el cementerio de la ciudad !
Nos dijo Silvia, hispanoargentina afincada en Madrid. Lo dijo con cierto "rubor"...
- Buenoooo, ... por ahí es un poco oscuro por la noches, hay que andarse con cuidado.
Más abiertamente, otro nos dió más claves,
- Ahí hay una villa ...
(eufemismo utilizado para nombrar lo innombrable para el orgullo patrio: las "favelas" Argentinas )
Nos hemos paseado por los ranchitos de la Vega en Caracas, por zonas intranquilizantes como la periferia de Ciudad de Guatemala, por barrios "intocables" de Old Delhi... Participamos de la Asamblea de Movimientos Sociales que cerró el I Foro Social Mundial en Madrid, en la Cañada Real ( 4º mundo castizo). No veo porque no podríamos pasar por la villa-miseria.
De hecho, desde el punto en que me encuentro... , el camino más recto al encuentro con Noelia pasa por la Villa ¿qué hacer pues?. Finalmente, en una mezcla de curiosidad y ganas de reprimir el temor infundido por los demás . Maia y su dulce sueño es mi talismán. A modo de conjuro, me decido a encaminarme por la calle Fraga, atravesando la villa-miseria.
Antes de ello he hecho una pausa en la Plazoleta Santoro. Con un bonito árbol en el centro, y unos bancos de cemento, en los que la pintura se cae por momentos... Dos chicos aparacen risueños, y me saludan con una gran sonrisa, pulgar en alto y puño cerrado al verme fotografiar los bonitos murales-graffiti de la plazoleta, de gran fuerza (adjuntos).
Un adolescente con mochila a la espalda parece que toma un respiro también. "El estudiante" , me digo... No parece pertenecer a la villa-miseria, por su aspecto. Al momento, aparecen dos chicos más... que sin mediar palabra rodean al primero. Sentándose junto a él con una falsa sonrisa amistosa. Parecen intimidarle, pues "el estudiante" está tenso. Se revuelve los bolsillos mientras uno de lo chicos esconde una mano tras su espalda... Hablan aceleradamente, los dos chicos, parecen acelerados... Uno de ellos da una vuelta a la minúscula plaza, y vuelve, como "marcando el territorio" a la escena. Me siento en el banco, acercándome un poco, como espectador. En su rápida e inteligible conversación, los chicos mencionan algo que reconozco ... "pipa" y "marihuana"...
La escena se deshace sin más ... proseguimos nuestro camino. Tras atravesar la zona de infraviviendas (que me recuerda otras en la que he estado en este mismo continente) parece que Maia sigue durmiendo plácidamente... Bien.
PD: El resto del día, a ratos, no puedo evitar andar sumido en algunas cavilaciones... que cruzo con lo leído en los murales fotografiados : imbuido por mis últimas lecturas... ( H.G. Wells en la Máquina del Tiempo ) . Ad-hoc.
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